El ombudsman capitalino, Emilio Álvarez Icaza, señaló que es obligación del Estado garantizar el acceso al agua como un derecho humano con la creación de políticas públicas
MÈXICO, D.F. 1 septiembre 2009.- El presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal (CDHDF), Emilio Álvarez Icaza, aseguró que la escasez de agua "crea espirales de violencia". En la Ciudad de México, los primeros indicios de ello son el cierre de avenidas y manifestaciones vecinales por la falta del líquido.
El ombudsman capitalino aseguró que mientras más se agudice el problema, las manifestaciones violentas irán en aumento.
Álvarez Icaza dijo que es obligación del Estado garantizar el acceso al agua como un derecho humano con la creación de políticas públicas que diferencien el uso del líquido de industrial, comercial y habitacional.
Señaló que a partir de ello, el gobierno podrá establecer tarifas distintas a los consumidores y evitar la privatización del agua.
Al inaugurar la Sala de Prensa de la CDHDF Amado Avendaño, Emilio Álvarez Icaza indicó que en la Ciudad de México se vive una correlación entre el mapa de la pobreza y el de la falta de agua.
Explicó que esto favorece a que las personas de menor ingreso económico sean las más afectadas por la insuficiencia de líquido. El ombudsman urgió a modificar la cultura del agua para reducir los efectos de la penuria.
"No hay gobierno que alcance para cerrar la llave de la regadera, por eso es importante que la ciudadanía coopere".
Álvarez Icaza resaltó que las prioridades del Gobierno del Distrito Federal deben centrarse en arreglar fugas de la red hidráulica y proteger el suelo de conservación. "No es exagerado decir que la viabilidad de la ciudad está basada en el agua".
Fuente: "Planeta Azul"
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