jueves, 30 de mayo de 2013

Rotura de matriz de agua potable afectó a 8.000 familias en La Florida

Un corte del suministro de agua potable afecta a unos 8.000 vecinos de la comuna de La Florida, luego del rompimiento de una matriz en el sector de Las Palmas con Departamental.

En este mismo sector, durante las lluvias de esta semana, varias casas se anegaron debido a los trabajos que realiza la empresa Brotec en la construcción de un corredor del Transantiago, según denunciaron los vecinos y el municipio.

Por esta razón la citada empresa comenzó a realizar trabajos durante esta jornada y una retroexcavadora rompió la matriz de agua, dejando a miles de vecinos sin agua.

El alcalde de La Florida, Rodolfo Carter, se trasladó hasta el sector afectado y se mostró molesto "por la comedia de equivocaciones de Transantiago, Serviu y la empresa Brotec".

"No conformes con construir un corredor digno de Copeva que antes de estar inaugurado ya está anegado, no conformes con inundar las casas de vecinos, hoy día no encuentran nada mejor que además cortarle el agua porque han destruido una matriz", recalcó Carter.

"No se puede decir otra cosa que es una falta infinita de respeto, es humillante para nuestra gente, afortunadamente ya estamos repartiendo agua y en buena parte ya se ha repuesto el servicio, pero la gran lección acá y el llamado a Serviu es que se oponga del lado de los pobladores para que se construya un corredor como corresponde", añadió el jefe comunal.

Personal de Bomberos y del municipio están entregando agua a los vecinos del sector, mientras que el municipio y los vecinos del sector anunciaron que este jueves acudirán a tribunales para entablar querellas contra Serviu y contra la empresa Brotec.

Fuente: http://www.cooperativa.cl/noticias/pais/servicios/agua/rotura-de-matriz-de-agua-potable-afecto-a-8-000-familias-en-la-florida/2013-05-30/004806.html

Gobierno dice que lluvias alivian situación eléctrica, pero son insuficientes

Ministro de Energía dice que SIC tendrá precios menores con mayor aporte hidroeléctrico. Con 38%, precios caerían a US$ 150 MWh. Estima que embalse Laja demorará unos tres años en volver a niveles pre-sequía, mientras que Ralco y Pangue lo harían en 18 meses.


Embalse RalcoEl frente de mal tiempo ayudó a aliviar en parte la compleja situación que viven los principales embalses para generación eléctrica, aunque es temprano para saber si la situación mejorará el resto del año. Esta es la conclusión que saca el ministro de Energía, Jorge Bunster, del aporte de las lluvias. “Sin duda que es un alivio, pero es insuficiente para marcar una tendencia muy significativa. Hay más agua, pero es prematuro poder señalar que esto pueda significar un cambio, si no viene acompañado de nuevos frentes, que es lo que esperamos”, dice.

Agrega que los embalses necesitarán más de un invierno de lluvias normales para recuperar sus niveles, y que en el caso de los interanuales, como Lago Laja, podría tomar incluso tres. “Necesitaremos más de un año de lluvia para recuperar el Lago Laja. Pueden ser dos o tres años de una hidrología húmeda. En lo otros, Colbún, Pangue y Ralco pueden recuperar esos niveles probablemente en menos tiempo, un año, año y medio”, sostiene.

El ministro recuerda que hasta antes de las lluvias, la energía contenida en los embalses llegaba a 118,4 GWh, mientras que a la misma fecha de 2012 alcanzaba a 1.292 GWh. “Este es el cuarto año de sequía y, por lo tanto, se han reducido los niveles de embalses, tanto para generación como mixtos. Las lluvias son una esperanza. Se debe tener en cuenta que hay una cantidad de agua representada por la nieve que cayó en la cordillera. Eso significa mejores deshielos y contribución a los embalses en primavera”, dice.

Bunster ratificó que el aporte de las hidroeléctricas subió a 32% (estaba en 25%), y que en la medida que siga subiendo y se reemplace el aporte del diésel, la energía más cara, los precios bajarán de los actuales US$ 250 por Mw a US$ 150 por Mw. “La generación hidroeléctrica en los días anteriores al frente estaba en torno a 24%. Hoy estamos previendo 32%. Para que eso impacte los costos marginales del SIC, debiéramos estar con una generación hidroeléctrica un poco más arriba, 35% o 38%”, afirma.

Reconoce que la salida de centrales como Nehuenco II, Santa María y Nueva Renca, impidió un efecto más potente en los precios, pero que una vez que estas entren en operaciones, los costos podrían seguir cayendo.

“Para que se logren bajar los costos marginales, hay que desplazar el diésel y reemplazarlo por generación hidro o carbón. El carbón está en 31%, y probablemente si se recuperan una o dos de esas centrales volveríamos a precios de US$ 150-US$ 140 por Mwh. Con una hidrología mejor, por encima del 40%, podemos bajar de los US$ 100 por Mw”, concluye.