jueves, 17 de enero de 2013

“no es razonable que el comité de ministro demore 16 meses en resolver hidroaysen”


La demora de 16 meses por parte del comité de ministros en revisar las reclamaciones contra el proyecto hidroaysen tiene complicada a la compañía. Daniel Fernández, vicepresidente ejecutivo, señala que están todos los antecedentes a la mano para resolver, por lo que ve falta de voluntad política para avanzar. Señala que, producto de esta demora, la primera central podría estar lista recién en 10 años más, y que este retraso tendrá efecto en la estreches de oferta que enfrentara el sistema eléctrico en 2016 por el crecimiento en la demanda y la falta de centrales.
Agrega que, debido a la falta de definiciones en temas como la carretera eléctrica, es difícil que hidroaysen presente el estudio de impacto ambiental de la línea de transmisión en 2013.
¿Qué le parece que el comité de ministros aun no resuelva la situación de hidroaysen?
El 9 de mayo de 2011 obtuvimos la resolución de calificación ambiental. Unos pocos meses después, se hicieron reclamaciones al comité de ministros, que en el caso de los opositores no son miles como ellos dicen, sino que 34, y por el lado de la empresa, otras 20. Todos los servicios públicos durante el EIA se pronunciaron sobre esos mismos temas. Por lo tanto, los pronunciamientos ya están.
¿Entonces, el comité debe analizar los mismos temas que ya han visto en la tramitación?
Absolutamente. No hay mayor merito para demorarse dándole mucha vuelta a temas que están originalmente resueltos. Este proceso de reclamaciones lleva más de 16 meses para resolver cosas que están más o menos claras.
  Pero también hubo recursos en los tribunales de justicia.
Todo ese proceso judicial demoro 10 meses. Desde el primer recurso hasta el fallo final de la corte suprema. La justicia hizo su tarea, reviso antecedentes, fallo en consecuencia y no tenemos pendientes ningún tema judicial. No entiendo como un comité de ministro necesita más de 16 meses y posterga una decisión.
¿Qué tan complicado para el proyecto es la demora?
Es una mala señal para el inversionista que tengamos 54 reclamaciones sin resolver. No hay voluntad para tomar las decisiones. Lo que queremos es de que una vez por todas so vea el proyecto como prioridad, que se resuelva las reclamaciones, para saber cómo seguir el proyecto.
¿En que estas trabajando hoy?
  Nos hemos dedicado mucho al trabajo en la región, con las comunidades, conversación puerta a puerta. Ha cambiado significativamente la aprobación sobre el proyecto. Hubo un incremento a nivel regional de más de 13 puntos en los últimos 6 meses en la aprobación del proyecto y una disminución de más de 6 puntos en el rechazo. A la región estamos prácticamente parejos, 46%--46% con el resto indiferente. A nivel de Cochrane y O’Higgins, la aprobación es altamente favorable. Nos hemos metido a las casas de la gente que nos dice que no le gusta el proyecto, pero valora que conversemos con ellos, seguiremos todo febrero y marzo con ese acercamiento.
Pero el proyecto sigue teniendo una larga oposición, que convoca miles de personas en plaza Italia.
Efectivamente, pero de gente que no conoce la región, que no sabe. La mayor parte de los proyectos tienen problema en chile hoy en día, resistencias en las comunidades locales o judicializaciones pendientes. Nosotros no tenemos eso. Tenemos una campaña nacional e internacional que crea una oposición, que crea mitos.
¿Cómo están avanzando en la línea de transmisión?
Hemos avanzado en estudios técnicos que estaban pendientes. Profundizamos los estudios de impacto ambiental, estamos trabajando con energía austral en opciones para el tramo desde puerto Aysén a Chaitén, de modo de hacerlo en conjunto. No estamos haciendo estudios de impacto ambiental por una gran indefinición, que se basa, en primer lugar, en el proyecto de la carretera eléctrica. No sabemos los parámetros que va a traer.
¿están en condiciones de presentar un EIA al menos por el tramo que esta al sur de Puerto Montt?
Cuando pasa el tiempo, las líneas bases ambientales se vuelven obsoletas. Entonces, de acuerdo con la evaluación, hay que volver a tomar líneas bases ambientales, y eso toma tiempo. Por ahora, no tenemos previsto ingresar el EIA hasta que no tengamos claridad respecto de esta decisión.
¿Cuándo sería ideal presentar EIA del tendido eléctrico?
En el programa original, hace un año. Hoy hay mucha incertidumbre, no están las condiciones para presentarlo. Estamos con los tiempos dilatados y es muy difícil presentarlo en 2013. En el programa original, deberíamos haber empezado las obras hoy. No lo estamos haciendo porque sin una línea de transmisión no nos vamos a arriesgar. La primera central estaba prevista para 2018, y hoy es difícil que este antes de 2022.
¿Se perdió mucho tiempo en el diagnostico para actuar?
  Diría que se perdió mucho tiempo en diagnosticar la crisis que viene. Tomo tres años en que los sectores políticos, empresarial, en las instancias técnicas dijeran: “sabe que, vamos a tener una crisis en 2016”.
¿Este será un tema importante en el próximo gobierno sí o sí?
 Ya esta pasando. Tenemos aumento en los costos de la energía considerable que están echando abajo proyectos, estamos perdiendo productividad como país, perdiendo competitividad en las exportaciones. Todavía no hemos caído en una vulnerabilidad mayor del sistema, pero si hay sequia, si hay mucho calor con el tema de las líneas de trasmisión, o sea cae una planta, hay vamos a tener problemas vulnerabilidad del sistema, eventuales cortes, y eso en 2016 cualquier especialista puede decir que es el punto de crisis.
Pero para el próximo gobierno el peor escenario es llegar al racionamiento eléctrico…
Eso ya existió, la gente se olvida, pero en 1998 vivimos eso. No sé si vamos a llegar a eso. Espero que de apoco se vaya haciendo las cosas siempre van a estar los motores diesel que se pueden integrar, que emiten una cantidad de contaminantes y un costo enorme. Eso dura hasta que falle una central.
¿Han reducido el presupuesto de hidroaysén?    
El presupuesto se ha reducido porque se ha ralentizado el proyecto. Hemos reducido el gasto, sobre todo en el EIA de la línea. Si los inversionistas van a gastar US$300 millones más en el EIA de la línea, que lo hagan razonablemente en un trazado adecuado, que se administrable de traminar, y con un horizonte de que se va a materializar.
Si no hay señales claras, es difícil que sigan girando recursos.
El presupuesto anual era del orden de US$  40 millones y en 2012 fueron US$26 millones  

FUENTE: LA TERCERA