Gritos, risas, aplausos y abrazos en la Tierra. La NASA logró llevar a Marte un nuevo vehículo espacial. Como un topo, el Phoenix buscará agua y hielo bajo la superficie.
"¡El Phoenix aterrizó, el Phoenix aterrizó, el Phoenix llegó a Marte!" y el Laboratorio de Propulsión Jet de la NASA (JPL) en Pasadena, California (EE.UU.) explotó de júbilo. El equipo de especialistas que invirtió los últimos cinco años de su vida en este proyecto no daba más de felicidad.El Phoenix viajó durante 10 meses y en menos de 10 minutos soportó hasta 9 G de fuerza –equivalentes a nueve veces 9,8 m/s2– . Lograr llevarlo a su destino fue una hazaña para la NASA, ya que las estadísticas le daban sólo el 50% de probabilidades de éxito.
"Definitivamente este es un paso más", decía uno de los especialistas aún con la emoción contenida en la voz. Se refería al proyecto de la NASA de llevar al hombre al planeta rojo.A las 18:30 (hora de Chile), comenzó la transmisión en vivo del amartizaje. Durante poco más de una hora, diversos especialistas fueron entrevistados por la presentadora para explicar cada aspecto de la misión que costó US$ 420 millones ($200 mil millones). Ninguno pudo esconder los nervios y casi todos pidieron que les deseara suerte antes de salir de cámara.A las 19:30 hrs. detuvieron las entrevistas. Una voz masculina anunciaba cada paso. La sala estaba llena de controladores vestidos de azul por un lado, y por el otro una masa de periodistas y familiares.Los primeros aplausos prorrumpieron nueve minutos después, cuando el Phoenix se separó de sus propulsores.
La transmisión no dejaba escuchar los comentarios de la sala, pero se palpaba la tensión del ambiente; pequeños paseos de un lado a otro, manos unidas en gesto de oración y caras tensas."El Phoenix comenzó a disminuir su velocidad de descenso"; más abrazos y aplausos. "600 metros, 500 metros...100 metros...¡tenemos señal de Phoenix en suelo marciano!".
Fuente: "El Mercurio"
No hay comentarios:
Publicar un comentario