Las nuevas sanciones incluyen cinco años de cárcel y multas de hasta $200 millones. "Esperamos que se tramite pronto en el Senado para poner fin a este tipo de situaciones", comentó el ministro Golborne, que ayer se hizo presente en la sesión.
La Cámara de Diputados aprobó con 104 votos a favor y dos abstenciones, un proyecto de ley que aumenta las sanciones por robo de agua. Se trata de multas por extracción ilegal, que podrían llegar hasta los $200 millones y cinco años de cárcel.
Además de aumentar las sanciones, la ley tiene como objetivo generar una tipificación de las conductas e infracciones que están castigadas por la norma, así como entregar a la Dirección General de las Aguas (DGA), el poder para llamar a la paralización y cegamiento de los pozos, cuando se registren situaciones de robo.
El ministro de Obras Públicas, Laurence Golborne, estuvo en la sesión, y tras el fallo comentó que "esto representa un gran paso para nuestro Ministerio en su tarea de velar por la protección de los recursos hídricos". "Durante mucho tiempo, las penas y multas no se condecían con el daño causado, tanto al medio ambiente como al resto de los usuarios", añadió, "este proyecto está hecho justamente para remediar este problema, y ahora esperamos que se tramite pronto en el Senado para poner fin a este tipo de situaciones".
Por su parte, el director general de Aguas, Matías Desmadryl, dijo que "gracias a este proyecto, y al sustancial aumento de las sanciones que contempla, será posible realizar una mejor fiscalización y persecución de estos ilícitos".
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